Comunicado de prensa
Las activistas feministas Frances Raday y Alda Facio, a nombre de la ONU, dejaron su mensaje a Chile: aprobar el aborto libre y sin límite de edad.
Tal “mensaje” fue muy bien recibido por el Gobierno, que se ha empeñado en la promoción del aborto, por ahora limitado a tres causales, que serán punto de partida para llegar a su total liberalización.
Prueba de la sintonía gubernamental con las declaraciones de las referidas feministas, son las declaraciones finales de éstas dadas a conocer por la prensa. En ellas expresan, además de su agradecimiento a la Presidenta por su cálida acogida, que: “Chile se encuentra en un momento histórico en el cual posee la voluntad política y el potencial económico para realizar un cambio transformador en las vidas de las mujeres, avanzando desde una sociedad patriarcal y conservadora hacia una sociedad en la que la mujer tiene iguales derechos”.
Como señal de chocante parcialidad de las visitantes, importa destacar que la referida Comisión sólo se entrevistó con organizaciones pro aborto y no invitó a ninguna organización social que promueve la defensa de la vida desde la concepción hasta la muerte natural.
Por último, se debe consignar la falta de respeto a la soberanía nacional de una Comisión de funcionarias internacionales que visita al País en el preciso momento en que iniciativas pro aborto son tramitadas por el Poder Legislativo. Tales declaraciones constituyen una interferencia y presión indebidas e inaceptables, máxime proviniendo de supuestas “expertas en derechos humanos” que se valen de sus cargos para atacar al más básico de ellos, el derecho a la vida.
Todas estas circunstancias muestran que las recomendaciones emitidas no pasan de la repetición de una consigna ideológica y amoral, tomada de antemano y sin la debida investigación objetiva de las condiciones del País.
Por lo anterior ellas no deben ser tomadas en consideración por los legisladores ni por la opinión nacional.
Acción Familia,
11 de septiembre de 2014