Nuevo triunfo antiabortista en Chile
Acción Familia – 19 Ene 2007.- La encuesta nacional realizada por el Senado, preguntando quién es favorable a que se discuta una ley de aborto «terapéutico», tuvo un 68,36 % de los votantes (29.021) contrarios a la discusión, frente a 31.64 % (13.432), favorables a ella.En menos de sesenta días, dos iniciativas abortistas han sido rechazadas. A fines de Noviembre pp., un grupo de parlamentarios hizo que la Cámara de Diputados declarara inadmisible el proyecto de legalización del aborto, presentado por dos diputados de la izquierda socialista.
En estos días, el Senado realizó una encuesta a través de su sitio web pidiendo a los lectores votar a favor o contra la idea de discutir una ley de aborto «terapéutico» en Chile. La abrumadora mayoría se ha manifestado contraria a esa discusión, lo que muestra que en nuestro país, ni siquiera con pretextos «humanitarios» o apelando a la sensibilidad se conseguirá legalizar la matanza de los inocentes.
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Sin embargo, ni la ley de Dios ni el respeto de la opinión de los chilenos lleva los políticos de izquierda a hacerlos desistir del intento de legalizar este crimen.
A dos meses de haberse rechazado la admisibilidad de un proyecto para despenalizar el aborto, que la Cámara estimó inconstitucional, el presidente de la corporación, Antonio Leal (PPD), acogió ayer a trámite una nueva moción de los mismos parlamentarios de la Concertación destinada ahora a autorizar el aborto «terapéutico», en vísperas de que la Presidenta Bachelet dicte el decreto que autorizará distribuir la píldora del día después.
El diputado socialista Marco Enríquez-Ominami, advirtió: «Aunque les duela, vamos a volver a fustigar y a interpelar a los diputados de la DC, porque no pueden seguir censurando al país».
Según la lógica de la democracia, las mayorías son las que guían al país. Sin embargo, aunque la mayoría se manifieste contraria al aborto «terapéutico», aunque la Cámara declare inconstitucional un proyecto análogo, los socialistas continúan pretendiendo representar al país. Es el temperamento dictatorial del socialismo el que va mostrando su faz, como lo hace en España.
En Chile, ¿estaremos volviendo a los tiempos de los «resquicios legales» y del atropello de la institucionalidad como método de hacer política?
