Comunicado de Prensa
Acción Familia expresa su profunda alegría por el hecho de que la Cámara de Diputados haya declarado inadmisible el proyecto de legalización del aborto, presentado hace pocos días por dos diputados de la izquierda socialista, y por la constitución a ese propósito de un nutrido grupo de diputados, de varios partidos políticos, en defensa de la vida.
Ambos acontecimientos deben marcar en la política nacional un giro definitivo, en el sentido de que los parlamentarios de inspiración cristiana unan fuerzas en defensa de la familia y de la vida, y aíslen a la minoría socialista que trama la descristianización de Chile.
Hasta ahora, el fraccionamiento de las fuerzas que se declaran cristianas permitió que la izquierda radical a menudo mantuviese la iniciativa, presentando proyectos claramente contrarios a la vida y a la integridad de la Familia. Así, el País corrió el riesgo frecuente de que una mayoría ocasional termine aprobando leyes claramente contrarias al bien común.
El reciente proyecto de legalizar la eutanasia, y ahora el de aprobar el aborto, fueron ejemplos de la agresividad de la izquierda cuando se cree apoyada por quienes deben combatirla. Y el fracaso en ambas pretensiones nos dio un ejemplo de la tranquilidad que se da a la Nación cuando los parlamentarios cristianos colaboran entre sí para preservarla de esas amenazas.