Se compromete a realizar la construcción de una «patria grande», que englobaría a todos los países de Latinoamérica, siguiendo la línea del dictador Chávez.
El diario Folha de S. Paulo, del día 21 de septiembre recién pasado, traía una noticia, procedente de Buenos Aires, en la que informa que durante la campaña política para las elecciones presidenciales argentinas, la candidata Cristina Fernández de Kirchner invitó a la tribuna al presidente de Ecuador, Rafael Correa. Este expresó su apoyo a la candidatura en los siguientes términos: «Compañera Cristina, no dude que usted será la presidente de la república Argentina».
Es sabido que Correa sigue la línea de izquierda nacionalista de Chávez y de Evo Morales.
Tanto Correa como Cristina Fernández exaltaron una misteriosa «patria grande«, que englobaría a todos los países de América Latina. «Queremos construir una relación de hermandad entre argentinos y ecuatorianos», dijo. Kirchner, a su vez, exclamó: «¡Viva Ecuador! ¡Viva la patria grande!».
Cristina Fernández agregó: «Argentinos, hermanos y hermanas ecuatorianos, nuestro compromiso también es con el pueblo latinoamericano y con la patria grande«.
La presencia de un presidente extranjero en la campaña presidencial argentina, es un hecho inusual. ¿Será éste un primer paso para la construcción de esa «patria grande»?
¿Cómo sería ésta? Es claro que no podrá dejar de tener el sello de sus creadores. Es decir, parece que se está planeando la construcción de una unidad latinoamericana, que la prensa casi no menciona, que seguiría los patrones de una izquierda nacionalista y verdaderamente dictatorial de Chávez.
Curioso nacionalismo que quiere la desaparición de las naciones existentes, para fundirlas en un todo supranacional, sin personalidad propia.
No se sabe cuáles son los países latinoamericanos que estarían comprometidos en este proyecto. ¿Algún lector lo sabe?