El Alvear Palace Hotel de Buenos Aires inauguró un curso intensivo de etiqueta, protocolo y buena educación para 30 niños de 8 a 13 años. Ellos se sientan adecuadamente, en mesas con vajilla de porcelana, copas de cristal y cubiertos de plata.
Asisten a conferencias de comportamiento en sociedad, mientras los mozos con guantes blancos sirven agua, jugos y delicados sándwiches.
La profesora Karina Vilella enseña cómo una persona educada debe tomar los cubiertos, saludar, decir «por favor», agradecer, ser puntual, etc. Los niños aprenden a poner una mesa «a la inglesa» y una mesa «a la francesa» y el modo de distribuir en ella a los invitados.
Sorprende ver a los niños tranquilos y obedientes en el ambiente aristocrático del Hotel Alvear, donde ellos «están en un lugar donde se respira elegancia, y se comportan de acuerdo a lo que ven a su alrededor».
Exactamente lo contrario es lo que ocurre en ambientes vulgares, como ciertos lugares ultramodernos que generan malestar, favorecen la mala conducta y deforman las almas de los niños y adultos.