La Sierva de Dios María Clotilde Saboya Napoleón y la líder comunista Ana Pauker
La Sierva de Dios María Clotilde Saboya Napoleón, (1843-1911) insigne no sólo por su nacimiento y por su alta distinción personal, sino también por su virtud, será elevada a la honra de los altares, pues ya está en proceso la causa de su beatificación.
Por la nobleza de su porte, representa ella el tipo característico de dama cristiana del siglo pasado, toda hecha para la vida de sacrificio, principalmente en el hogar, para las grandes dedicaciones de madre y de esposa según el espíritu de la Iglesia.
A pesar de ser muy femenina, se refleja en todo su ser una firmeza notable, que no excluye una gran bondad.
Resumiendo; puede ser tenida en cuenta como expresión auténtica del verdadero ideal femenino.
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La líder comunista
Ana Pauker representa el modelo de mujer formada según las reglas del comunismo. Grosera, masculinizada, no muestra ni el recato ni la dedicación que la situación de la mujer en la sociedad exige.
Es la representación insulsa y sin sentimientos, propia de la era de brutalidad, cuyo advenimiento el neo-paganismo moderno prepara.
Catolicismo N° 21 Septiembre de 1952
