Santa Teresa de los Andes
13/07/2023 | Por Acción FamiliaSuele mostrarse a los santos como entes fuera de la realidad. Santa Teresa nos muestra aquí una profunda comprensión de la lucha entre el bien y el mal en la HIstoria
Suele mostrarse a los santos como entes fuera de la realidad. Santa Teresa nos muestra aquí una profunda comprensión de la lucha entre el bien y el mal en la HIstoria
Sobre los apóstoles San Pedro y San Pablo, D. Guéranger, en la Année Liturgique, tiene estas palabras: Pedro y Pablo no cesan de escuchar las oraciones de sus devotos porque uno de los triunfos del infierno ha sido de haber adormecido en nuestro tiempo la fe de los justos
San Juan Bautista increpó Herodes su pecado: “No te es lícito”. En este “No te es lícito”, reconocemos el timbre de voz de todos aquellos que delante del vicio no dudan en enfrentarlo y llamarlo por su nombre. San Juan Bautista recibió el mayor elogio que Nuestro Señor Jesucristo hizo: “Os digo: Entre los nacidos de mujer no hay profeta mayor que Juan” (S. Lucas, 7-28).
El simple enunciado del Nombre Santísimo de Jesús recuerda la idea del amor. ¡El amor insondable e infinito que llevó a la Segunda Persona de la Santísima Trinidad a encarnarse! El amor expresado a través de esa humillación incomprensible de un Dios que se manifiesta a los hombres como un niño pobre, que acaba de nacer en una gruta.
Vemos en la escena a Santa Isabel literalmente encantada con la visita de su prima, la Santísima Virgen. Toda su persona: su fisonomía de buena disposición y grandísimo aprecio, su inclinación, sus manos, su rostro como que iluminado, y sobre todo su mirada expresan una dedicación y un cariño por la Madre de Dios, que nos deja verdaderamente encantados.
Santo, Padre y Doctor de la Iglesia, fue el máximo pensador del cristianismo del primer milenio y según Antonio Livi uno de los más grandes genios de la humanidad.Autor prolífico,dedicó gran parte de su vida a escribir sobre filosofía y teología, siendo Confesiones y La ciudad de Dios sus obras más destacadas.
Nuestra Señora del Buen Consejo “Mater Boni Concilii ad Genazzano” imagen que en el siglo XV se trasladó allí milagrosamente desde Scutari, Albania, huyendo de la invasión turca y en respuesta a una fervorosa oración de dos piadosos albaneses.
Ella representa la mujer fuerte, de valores incomparables, a que se refieren las Sagradas Escrituras. Como una piedra rara, uno camina fácilmente hasta los confines de la tierra para encontrarla.
La glorificación de Nuestro Señor en el Domingo de Ramos nos recuerda nuestra inconstancia: lo glorificamos y luego lo crucificamos con nuestros pecados o con la aceptación indiferente de la implantación de leyes inicuas en nuestro País.
San Juan Eudes dice que Nuestra Señora estudiaba las Sagradas Escrituras para saber como sería el Mesías y, en el momento en que ella lo concibió por la inteligencia, por el amor, y tuvo el deseo de ser la esclava de quien fuese su Madre, en ese momento el Angel Gabriel la invitó a serlo.