Todo el mundo sabe que, detrás de cada gran hombre, siempre hay una gran mujer. La historia está llena de ejemplos…
En el Cincuentenario, de aquella que fue la madre de nuestro inspirador, Plinio Corrêa de Oliveira, hemos querido dedicar a Doña Lucilia, un pequeño homenaje publicando una breve reseña de lo que fue su carácter, su psicología y su vida.
Quizá esto pueda edificar a las madres de hoy en la ardua tarea que tienen en nuestro mundo decadente.
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«Mi madre me enseñó a amar a Nuestro Señor Jesucristo,
me enseñó a amar a la Santa Iglesia Católica».
Plinio Corrêa de Oliveira
Con estas palabras simples y profundas, el prof. Plinio Corrêa de Oliveira resumió el papel desempeñado en su educación por su madre Lucilia Ribeiro dos Santos Corrêa de Oliveira.
Después de una vida dedicada a la oración y la educación de sus hijos y luego de sus nietos, Doña Lucilia entregó su alma a Dios el 21 de abril de 1968.
Recordando el quincuagésimo aniversario de su tránsito, ofrecemos a nuestros lectores un breve artículo ilustrado, en formato pdf, que resume su vida.
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